Luis Cavalli realiza un descargo sobre la situación de Coopelectric

Cuando es triste decir “te lo dije”

Ante la intervención de Coopelectric por parte de CAMMESA y el INAES

Como principal referente de la oposición de la actual conducción de Coopelectric me veo obligado en la necesidad de volver a hacer visible las enormes falencias existentes en nuestra cooperativa, para que no se sigan tapando y aprender de la experiencia y de los errores. Y para que la comunidad conozca la gravedad moral y legal de lo que esto significa. Esconder bajo la alfombra la basura , no sirve para nada, salvo para el que la genera. Es triste tener razón, que no hayan escuchado y ahora tener que decir, frente a la desgracia “Te lo dije”.

Desde hace cinco años vengo sosteniendo públicamente  que la cooperativa está virtualmente quebrada y que se financia ilegalmente no pagando la electricidad que compra a CAMMESA y que la intervención era un final anunciado, porque el sistema de subsidios no daba para más. La eliminación de los subsidios a la energía ya había sido acordado por el Ministro Massa con el FMI en el año 2022 y fue un postulado central, que ahora cumple, del Presidente Milei. Es decir, no es una cuestión partidaria. Lo mas triste para Olavarría es que había alternativas de solución, que señalamos claramente en el año 2021, cuando había enormes posibilidades por el artículo 87 del presupuesto Nacional, que condonaba la deuda de las distribuidoras con CAMMESA y que la conducción curista, eseverrista, camporista, no aprovechó por usar la cooperativa con fines políticos.

En primer lugar, la situación crítica del sistema eléctrico y la anomalía de lo que pasaba en CAMMESA y el drenaje de millones de dólares que se gastaban del presupuesto nacional para financiar a los deudores morosos, como Coopelectric, (entre 7 mil y once mil millones de dólares en los últimos diez años), fue explicado en un libro de mi autoría, que me consta fue leído por el secretario de energía y la secretaria anterior. El sistema eléctrico así como estaba no podía seguir resistiendo. El cambio iba a venir y vino, con esta lógica consecuencia para las malas gestiones.

La crítica de que se usa la Coopeelctric con fines políticos partidarios es un argumento más, esgrimido por la autoridad interviniente, para tomar la decisión de intervenir, que desoyeron los que hace treinta años destruyeron la cooperativa. Esto agrava la situación de sus directivos, y de las asambleas que aprobaron los balances, síndicos y auditores, en cuanto al manejo de los dineros ajenos del conjunto de los socios cooperativos. Cobraron el servicio a los usuarios y no le pagaron al que les vendió esa electricidad, que es CAMMESA. La obviedad y evidencia de esta situación no puede haber pasado inadvertida para quienes tenían responsabilidad en la ejecución y control del manejo administrativo y financiero de Coopelectric.

La falta de transparencia, otra crítica constructiva desoída, que significa esconder el balance donde claramente se evidencian las enormes pérdidas y deudas de la entidad, les permitía seguir escondiendo al resto de los socios y a la comunidad que la cooperativa está quebrada. Y así poder seguir sacando beneficios particulares sobre la desgracia del conjunto. Le adjudican a Abraham Lincoln decir: “Puedes engañar a todas las personas una parte del tiempo y a algunas personas todo el tiempo, pero no puedes engañar a todas las personas todo el tiempo”.

Tal vez fui un ingenuo al pensar en oponer argumentos éticos y juego limpio en elecciones  a personas que se enorgullecen de ser “vivos”, de saber usar todas las trampas y lo peor de la mala política para oponerse al adversario. Así lograron que en 25 años hubiera solo dos elecciones cuando debería haber todos los años y eternizarse en sus cargos para beneficio personal.

Pero todo llega. Y esta vez, de la peor manera.  Es de esperar que esto sea un ejemplo en la ciudad para que no se repita esta vergüenza  y podamos volver a creer en la justicia, en la honradez y en que vale la pena pelear por cosas del bien común, porque la cooperativa es de los socios.

Luis Cavalli